El Temple en la Mesa

Como creo que recordaran en el anterior articulo hablamos de los tiempos en la sala y del desarrollo del servicio como tal, realizando un simil "musical" como si de una orquesta se tratara. En esta ocasión nuestro tema a desarrollar se centra en el cliente y en la importancia de los pequeños detalles por nuestra parte, es decir, analizamos la relación cliente-maitre, eso si, para hacerlo lo más ameno posible emplearemos otro simil, es esta ocasión, Taurino.


Al igual que la asignación de cada lote a cada torero viene determinado por la suerte, nosotros nunca sabemos que cliente va a entrar en nuestra plaza, es importante reconocer a que nos estamos enfrentando y como vamos a diseñar la faena para que el cliente cumpla todas sus expectativas durante la terna.

Esta ampliamente demostrado que del 60% al 70% del lenguaje entre humanos es no verbal, es decir, es de vital importancia observar las hechuras de nuestro contrincante, su forma de andar, mirar, su gestualidad, como se mueve por el ruedo, todo es importante para asi recavar toda la información posible sobre el cliente

Al igual que al comienzo de una faena, el torero sale al encuentro del toro,  en la primera toma de contacto con el cliente se va  a reflejar, casi de inmediato, como va a desarrollarse el evento y como va a ser la relación entre diestro (maitre) y toro (cliente).

De este modo, pueden concurrir varias situaciones, desde que el cliente sea un "manso" hasta que sea un "toro bravo". Del mismo modo, podriamos hablar de un maitre mediocre hasta un excelente profesional. Evidentemente la excelencia se ecuentra entre un cliente bravo con un maitre excelente.
 

Pero centrandonos en nosotros como profesionales y de nuevo usando el paralelismo con el arte de la tauromaquia, es labor del torero entender a cada toro y sacarle el máximo partido. De hecho hay toros que engañan, igual que clientes, que parecen ser una cosa y luego resultan ser la contraria.

En numerosas ocasiones me he encontrado con un cliente que a priori parecía estar satisfecho con la comida y con el servicio para luego darnos una cornada. Tambien he sufrido el caso opuesto, un cliente esquivo, exigente que gracias a nuestros capotazos y chicuelinas acaba agradeciendo habernos elegido.

El exito absoluto de la faena y que merece puerta grande sucede en contadas ocasiones, por ello recomendamos en términos taurinos, "Para ser buen torero, entender al toro, es lo primero"

Les dejo con unos consejos aplicables a ambas dsiciplinas:

JAMAS OLVIDES....

Se amable....

Muestra actitud...

Atiende con rapidez...

Resuelve las quejas...

Brinda un trato personalizado...

Ofrece comodidad...

Ofrece seguridad...

Ofrece servicios adicionales..

Nunca presiones...

TIPOS DE CLIENTES

En el mundo de la sala dividimos los clientes con los mismos colores que un semaforo , verde, amarillo y finalmente rojo.

VERDE
Amable , paciente, agradable, campechano, educado (el cliente que todos deseamos)

AMARILLO 
Demandante, compara la relación calidad/precio del producto, puntilloso, todo debe llegar a tiempo y al que se le debe prestar una atencion detallada y milimetrica , suelen ser muy fieles y regulares a sus restaurantes de ocio , por lo que seran igual o mas importes aun.

ROJO
Exigente, intrusivo, pedante , poco o mal educado , sabelotodo , le gusta aparentar y hacerse notar en la sala incluso nada mas llegar, con comentarios tipo : "hace frio-calor" , "esta mesa no es de mi agrado", "la musica esta muy alta" siguiendo con comentarios como , "no beberemos vino llevese las copas" , "traigame un vaso mas alto para el agua" , "una coca cola con 2 hielos y medio,limon y lima".

 

Si desean más información sobre Tipos de clientes en restauración visiten http://www.romanticagastronomia.com/11-tipos-de-clientes-restaurante/

Sin mas, espero les haya entretenido el post y para despedirme solo quiero dedicar unas breves palabras a todos aquellos que se visten con traje de luces en la sala de cualquier restaurante y además se dejan la piel en ello.

Olé, Olé y Olé

Muchas Gracias.
Diego Mateo.